Quizá es una pregunta que no se hace con frecuencia. En Costa Rica estamos acostumbrados a tener agua potable, tanto que podría parecernos muy lejano el déficit del 40% al que llegará el planeta en el 2030, si seguimos haciendo lo mismo.
No hay que viajar miles de kilómetros. En nuestro país ya vemos los efectos del desabastecimiento: comunidades guanacastecas experimentan de 6 a 12 horas de racionamiento y el caudal del Río Tempisque llega a reducirse hasta en un 50%. Nos quedan unos años para revertir décadas de desperdicio y frenar la crisis hídrica, empezando por tener claro cuánta agua consumimos.
Pensemos en un típico día de su semana. Usted se levanta temprano y va directo a la ducha. Tomar una ducha para empezar la jornada parece lo más inofensivo, pero, ¿sabía que cada minuto que pasa bajo el agua podría significar un consumo de hasta 9 litros? O sea, si dura 10 minutos con la ducha abierta, consume 90 litros de agua. Si se baña dos veces al día, ¡usted gasta 180 litros diarios solo en el baño!
Pero su necesidad de agua no acaba allí. Usted se lava los dientes al menos 3 veces al día y cada vez que lo hace puede estar dejando correr hasta 7 litros de agua, particularmente si olvida cerrar el tubo. Sume entonces un promedio de 21 litros a su consumo diario de agua. Si luego debe lavar los platos, considere que esta actividad puede consumir hasta 50 litros por tanda.
El recuento no termina sin considerar el agua que gasta cada vez que utiliza el inodoro. Un sanitario tradicional usa de 6 a 16 litros en cada descarga. Pensando en el peor escenario, usted consume 80 litros al día “jalando la cadena” unas 5 veces.
Al final de un día común, usted fácilmente consume un promedio de 331 litros de agua potable. Bueno, 333 si sumamos los 2 litros de agua diarios que debería tomar para hidratarse. Lo anterior sin contemplar la cantidad que pudo haber empleado preparando sus alimentos, lavando su ropa o regando el jardín. ¡Esto representa unos 1.375 vasos de agua!
Lo más alarmante es que en Costa Rica, toda el agua que utilizamos para estas actividades es agua potable y que mucha se desperdicia.
Usted puede cambiar su patrón de consumo
Es imposible dejar de utilizar agua para actividades no relacionadas con el consumo humano (lavar, sanitarios, riego), pero también es imposible seguir con los patrones de consumo que están poniendo en peligro la disponibilidad de este recurso tan valioso para usted, para sus seres queridos y las futuras generaciones.
Lo que sí es posible –y muy sencillo– es reducir la cantidad de litros de agua que consumimos al día.
Por ejemplo, al tomar duchas más cortas, cerrar el grifo mientras se cepilla los dientes y lava platos, corregir fugas y al utilizar la lavadora menos veces por semana, usted podrá disminuir fácilmente el consumo innecesario y el desperdicio de agua.
Y, ¿qué tal si le dijéramos que también existe toda una línea de productos con tecnología de consumo eficiente para ahorrar grandes cantidades de agua? Acualogica ofrece migitorios en seco que no requieren agua, inodoros salvagua que utilizan solo tres litros por descarga, y duchas y lavamanos que ahorran hasta 75% del líquido en comparación con los tradicionales.
Le invitamos a conocer más de nuestros productos. Recuerde que sus pequeñas acciones pueden ayudar enormemente a proteger este valioso recurso, mientras le ahorran dinero en su factura de agua.